El precandidato a presidente visitó Cipolletti junto a Aníbal Tortoriello. Pidió militar "en la familia, en la puerta de la escuela y en cualquier lado. Si lo hacemos tres semanas, seguro ganamos".

Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias del 13 de agosto serán, como nunca antes, un factor determinante para la elección del próximo gobierno nacional. Las principales alianzas electorales definirán sus candidatos en las PASO, entre ellas la coalición Juntos por el Cambio. La pelea voto a voto por la candidatura había traído a la ciudad a le precandidata a presidenta Patricia Bullrich y ayer fue el turno de su contrincante, Horacio Rodríguez Larreta, quien inauguró local de campaña y ratificó su postura de no agresión porque “necesitamos unidad”.

El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires visitó Cipolletti como parte de una recorrida de campaña que incluyó actos en Neuquén y Bariloche. En esta ciudad, fue acompañado por Aníbal Tortoriello, quien encabeza la lista de precandidatos a diputados del sector. “Necesitamos apoyo y presencia territorial, para hacer los cambios que tenemos que hacer. Ahora debemos ganar y apretamos los dientes, pero lo importante viene después, que es gobernar. Necesitamos apoyo para hacer cambios profundos”, dijo Larreta. Y llamó a un nutrido grupo de votantes, a militar “en la familia, en la puerta de la escuela y en cualquier lado. Si lo hacemos tres semanas, seguro ganamos”.

El espacio que encabeza Rodríguez Larreta ganó las elecciones provinciales realizadas hasta el momento, lo que fortaleció la expectativa del espacio y la postura de no agresión del precandidato. Algo opuesto a la campaña que lleva adelante Bullrich. “El camino no es a las trompadas, la política no es una guerra nuclear. Hace 40 años que venimos a las piñas y necesitamos unidad”, insistió Rodríguez Larreta.

Durante su discurso Larreta expresó “los argentinos podemos estar mucho mejor, yo me vengo preparando hace muchos años para este desafío, esta enorme responsabilidad. Estoy convencido que podemos tener un país mejor, pero el camino no es desde la violencia. Es desde buscar una mayoría de argentinos que impulse un cambio profundo con hechos, resultados y acciones concretas. Tenemos que construir un camino diferente al que lleva esta Argentina de 40 años de democracia que nos ha traído hasta acá. Hasta la inseguridad, la frustración, la inflación, vamos por una Argentina del hacer”. 

El referente del PRO aseguró que apuesta al diálogo, pero puso al kirchnerismo como límite. “No voy a acordar con todos. Con el kirchnerismo no nos vamos a poner de acuerdo, pero en el medio hay un montón de gente para ir espalda con espalda”, expresó.

El jefe de Gobierno porteño pidió “militar y cuidar los votos” sin romper con Bullrich y sus representantes provinciales. “Para ganarle al kirchnerismo hay que tener unidad. No voy a insultar a nadie, aunque lo hagan conmigo. La gente quiere soluciones y represento el resultado de la gestión en CABA. Espero que apoyen eso el 13 de agosto”.

Fuente: LMCipolletti/RN